No me gusta cómo está ‘evolucionando’ Internet, la Red de redes…

Por favor, leed un poquito más, me refiero a libros… E-reflexiones de un ‘viejuno’, o ‘viejoven’…
Por favor, leed un poquito más, me refiero a libros... E-reflexiones de un 'viejuno', o 'viejoven'...
Post recuperado de KnowHow…

Valencia, 01/09/2017, G.B.

Tal vez sea un pensamiento, una opinión de un ‘viejuno‘ como yo, de alguien que ha ido observando cómo iba cambiando el panorama digital a la par que el social… Bien, seguramente no soy un caso aislado, ¿verdad? Y ya sé que no es la primera vez que hago esta e-reflexión, pero ahora me toca mucho más de cerca…
El asunto es que me está empezando a parecer todo bastante vacío de significado y excesivamente ‘populoso‘ en forma. Ahora lo que triunfa es el éxito rápido, el tener muchos ‘seguidores‘, muchos ‘me gusta‘, muchos ‘re-tweets‘, etc., etc., aunque lo que se está comunicando, publicando, no tenga una gran ‘trascendencia’…

También me estoy cansando del excesivo apego a definiciones en un único idioma, aunque yo lo haya estudiado en profusión y me guste; una cosa no quita a la otra. Al pan, pan, y al vino, vino!

Ahora estamos (o están) vendiendo nuestra intimidad por un pequeño pedacito efímero de gloria ‘absurda’, de fama, de notoriedad en un contexto que de por sí no la debiera tener, en mi humiñde opinión. Y para ello están trabajando duro las grandes empresas tecnológicas, que a fin de cuentas se reducen a  un gran grupo de inversores…

Y los llamados ‘gurús‘, ‘influencers‘, etc., etc., se prestan a ser parte del juego, piezas ‘clave’ para engordadr los beneficios de unos pocos e ir ‘lobotomizando‘ el cerebros de los más jóvenes, ansiosos por alcanzar la ‘fama’ que prometen. Realmente es algo que me disgusta y me preocupa, sobre todo porque tengo hijas en esa edad crítica, la que acepta los destellos de ‘gloria efímera’ y esta casi-dispuesta a perder su privacidad -incluso su propia identidad y su capacidad de crítica- por estar dentro del ‘Gran Círculo‘.

¿Vamos a intentar cambiar el rumbo, a no pensar tanto en beneficios económicos y en ir engañando ‘a lo bestia‘ a la gente? No lo sé, no lo sé… Es responsabilidad de todos aquellos que hemos vivido los cambios que han llevado al punto en el que ahora estamos, con sus pros y sus contras. Yo seguiré intentándolo, aunque sea solo o en ‘petit comité‘…

¿Y quién vigila a los vigilantes?

Post recuperado de KnowHow…

NOTA a 29/07/2017: Me apetecía volver a re-publicar esta e-reflexión, porque sigue estando de actualidad, por desgracia…

Otra e-reflexión sobre el control de la privacidad en la Red

Publicada originalmente el 06/06/2013, G.B.
La verdad es que estoy bastante sorprendido -bueno, es una forma de hablar-, y no gratamente, acerca de la intención del Gobierno de contemplar la introducción de troyanos en equipos informáticos de presuntos sospechosos para luchar contra el cibercrimen. Vamos, apagar el fuego con más fuego… Como si un verdadero hacker no pudiera saltarse ‘a la torera’ esa ‘chapuza’ que se pretende, y que estoy casi totalmente convencido de que ha surgido de una ‘cabecita’ que no conoce demasiado bien cómo funciona Internet.

Los hackers deben estar riéndose a gusto con esta proposición que nos hacen nuestros dirigentes, bueno, alguno de ellos, que también hay políticos inteligentes, decentes, honrados y que se preocupan por el bienestar de sus conciudadanos, a los que sirven. Lamentablemente, sospecho que a esos políticos buenos no se les presta, no les prestamos  la atención que  debiéramos…

No sé, pero creo que moralmente no es nada aceptable porque ¿cómo se demuestra realmente que se ha vigilado a personas presuntamente culpables de un delito? ¿Hecha la ley, no estará hecha la trampa, como la sabiduría popular afirma? ¿Al introducir un troyano -probablemente en equipos bajo sistemas operativos Windows, que es lo que la mayor parte de gente utiliza, por desgracia- no se podrá crear ‘falsas pistas’ si los responsables de dicha investigación son corruptos, cosa que por desgracia cada día vemos más? Y no quiero decir con esto que el cuerpo de la policía -que sería la encargada de llevar ‘este tema’- sea corrupto, pero los que manejan el ‘cotarro’, nuestros queridos políticos, ya no son al cien por cien de fiar, por desgracia…

¿Y si álguien fuera molesto, reivindicativo o tuviera datos e información que pudiera desmantelar algún tipo de actuación o decisión de alguno de las ‘manzanas podridas’ que todavía pudieran quedar en altos estamentos con total capacidad de decisión y completa inmunidad, qué pasaría? Me da hasta miedo pensarlo…

Espero que aquellos que toman las decisiones por nosotros sean más responsables y mucho más coherentes, además de solidarios. ¿Pido mucho…?

Como diría un personaje famoso de las novelas de Terry Pratchett, aunque la frase venga de lejos, la haya tomado prestada: “¿Quién vigila al vigilanteThe answer, my friend, is blowing in the wind

¿Estamos creando una Matrix?

Una pasada ‘furtiva’ por este blog para una pequeña e-reflexión…


Post recuperado de KnowHow…

Valencia, 20/05/2017, G.B.

Me paso de nuevo por KnowHow, aunque esté ‘parado’, para hacer una pequeña e-reflexión, probablemente solo para mí. Y es que me da la impresión de que cada día nos acercamos más a una especie de Matrix, a una despersonalización constante, a una carrera hacia un fin tecnológico, mientras los que la fomentan piensan que están haciendo un favor al conjunto de la humanidad (mientras sus bolsillos se llenan y cavan una tumba colectiva…). Ojalá lleguen a ser conscientes de que el dinero no se come, y de que nadie es eterno…
Hoy por hoy ves a la gente pegada a sus smartphones (o teléfonos ‘inteligentes’), orgullosos de su Instagram o red social favorita; mostrando al mundo virtual lo felices y llenas que son sus vidas… Yo ya llevo demasiados años en esto y veo que las cosas se han torcido, que el ‘marketing’ ha ganado la mano, que las personas venden sus vidas por un foco de luz imaginario, que nada es lo que parece y lo que parece realmente no es, que en definitiva estamos perdiendo el Norte (si alguna vez hemos podido vislumbrarlo). Y bien poco -por desgracia- podemos hacer. ¿O tal vez sí? Quién sabe…

Al menos queda el derecho -y hecho- al pataleo, que algunas veces en la Historia ha germinado en algo bueno. Espero que todavía queden opciones, por el bien de los que vendrán detrás.

Cierro este paréntesis con una cita:

There’s some fiction in your truth and some truth in your fiction…“. From The Boy (Animatrix).

Vuelve el SEO…

Una e-reflexión… y aprovecho para subir otra imagen de la NASA…

Fuente imagen: http://apod.nasa.gov/apod/ap160418.html
Fuente imagen: http://apod.nasa.gov/apod/ap160418.html
Post recuperado de KnowHow…

Valencia, 13/10/2016, G.B.

Parece ser, según dicen los ‘expertos’ y ‘gurús’ que el SEO (Search Engine Optimization), el conjunto de técnicas y acciones encaminadas a que una web aparezca en los principales motores de búsqueda en las primeras posiciones con determinadas palabras clave o frases clave, está resurgiendo, tras un letargo propiciado por el interés casi enfermizo por las redes sociales;  nunca hay que perder los orígenes, las bases, los cimientos. Con ellos siempre podremos construir cosas nuevas con un sólido apoyo, hasta que ese apoyo haya evolucionado lo suficiente parapoder sustituirlo por otro mejor.

Las redes sociales han supuesto un punto de inflexión, un cambio radical, pero basarlo todo en ellas sospecho que es un error, un pan de hoy para hambre de mañana. ¿Por qué? Pues porque en general no nos pertenecen, pertenecen a empresas privadas con intereses claros.

En mi opinión -y creo que en la de muchos- el SEO es una de las bases de la Red, junto con el también casi denostado HTML y los protocolos propios de Internet, las ‘entrañas’ de la web. Y eso, aunque debe mejorar con el tiempo, no tendría que desaparecer de la noche a la mañana, de la misma forma en que no desaparece nuestro alfabeto o nuestra gramática, aunque vaya evolucionando con el paso de los años, poquito a poco.

En fin, me alegro que a las cosas importantes, las cosas ‘duraderas’, se les dé la importancia que merecen, sin menospreciar nuevas -por utilizar un adjetivo más cercano- acciones, nuevas técnicas, nuevas aproximaciones. Al fin y al cabo, el mensaje es lo que importa, pero también cómo, a quién y a cuántos llega, y si llega, que resultado tiene, ¿no? No es algo nuevo, pero sí algo que se renueva día a día. Nada más.

P.D. Aprovecho al temática cósmica de la imagen para insertar este vídeo que no hace falta presentar…